Cómo ser un joven más semejante a Cristo
Cómo ser un joven más parecido a Cristo
La semejanza a Cristo es importante porque es la forma en que nos volvemos más como Dios y crecemos en nuestra relación con Él. También es un excelente testimonio para otros de la esperanza que tenemos en Cristo. Los beneficios de llegar a ser más como Cristo incluyen una relación más estrecha con Dios, una vida más plena y un testimonio para los demás.
La importancia de la semejanza a Cristo
¿Por qué es importante la semejanza a Cristo?
La semejanza a Cristo es importante porque, como cristianos, estamos llamados a imitar a Cristo en nuestra vida diaria (1 Corintios 11:1).
Al volvernos más como Cristo, no solo nos acercamos más a Dios, sino que también nos convertimos en mejores personas. Nos volvemos más pacientes, más amorosos y más indulgentes. Nos convertimos en mejores ciudadanos y mejores mayordomos de la creación de Dios. En definitiva, ser más como Cristo nos hace más humanos.
¿Cómo es la semejanza de Cristo?
La semejanza de Cristo parece una vida vivida para los demás. Parece una vida caracterizada por el amor, el gozo, la paz, la paciencia, la benignidad, la bondad, la fe, la mansedumbre y el dominio propio (Gálatas 5:22-23).
Parece una vida que siempre está buscando hacer el bien y ayudar a los demás. Parece una vida que no tiene miedo de defender lo que es correcto y hablar en contra de la injusticia.
Cómo llegar a ser más como Cristo
Estudio de la Biblia
Para llegar a ser más como Cristo, es importante estudiar la Biblia y aprender acerca de su carácter y enseñanzas. Además, pasar tiempo en oración todos los días te ayudará a acercarte más a Dios y desarrollar las cualidades de la semejanza a Cristo.
Finalmente, servir a los demás también es una forma clave de imitar el ejemplo de Cristo y mostrar su amor a quienes te rodean.
Los beneficios de llegar a ser más como Cristo
Una relación más cercana con Dios
Cuando nos hacemos más como Cristo, desarrollamos una relación más estrecha con Dios. Esto se debe a que estamos imitando el carácter de Cristo, quien es perfecto y santo.
A medida que crecemos en nuestra semejanza a Cristo, nuestros corazones se transforman y nos volvemos más amorosos, compasivos y perdonadores.
Este cambio en nuestros corazones nos permite experimentar el amor de Dios más profundamente y recibir Su perdón más fácilmente. También encontramos que somos más capaces de obedecer los mandamientos de Dios por amor en lugar de simplemente por deber.
Una vida más plena
Otro beneficio de llegar a ser más como Cristo es que nuestras vidas se vuelven más plenas y ricas. Esto se debe a que estamos viviendo de acuerdo con el diseño de Dios para nuestras vidas en lugar de intentar crear nuestra propia versión de la felicidad.
Cuando vivimos para Cristo, nuestras prioridades cambian y ya no buscamos cosas que finalmente nos dejarán vacíos e insatisfechos. En cambio, perseguimos metas piadosas que traen gozo y satisfacción duraderos.
También disfrutamos de mayor paz y satisfacción cuando confiamos en el plan de Dios para nuestras vidas en lugar de preocuparnos por el futuro o vivir en el pasado.
Un testimonio para los demás.
Finalmente, a medida que nos parecemos más a Cristo, brindamos un testimonio a los demás del poder transformador del mensaje del evangelio.
Cuando los no creyentes nos ven viviendo nuestra fe en la vida cotidiana, sienten curiosidad por saber qué nos hace diferentes de los demás. ¡Esto brinda la oportunidad de compartir las buenas nuevas acerca de Jesucristo con ellos e invitarlos también a una relación personal con Él!
Conclusión
La semejanza a Cristo es importante para los cristianos porque es una forma de acercarse a Dios y vivir una vida más plena. Hay muchas maneras de llegar a ser más como Cristo, pero algunas de las más importantes son estudiar la Biblia, orar y servir a los demás. Cuando nos parecemos más a Cristo, nos beneficiamos de una relación más estrecha con Dios y de un testimonio que puede influir en la vida de otras personas.